En 1989 se oficializa el Club Activo de BMX integrándose en el Registro de la Comunidad de Madrid y de la Federación Madrileña de Ciclismo, con el propósito, tal y como consta en sus estatutos fundacionales, de promover la práctica deportiva tanto en los aspectos promociónales como competitivos. Con más de 80 socios, ya desde sus inicios formaron parte los mejores corredores de la época e incluso se participo en organización de pruebas del entonces incipiente MTB.