Los que van al final del autobús son unos caaaabrones...
Los que van en medio del autobús son unos hijos deeeeeeeeee puta...
Y los que van delante del autobús son unos maaaaaaaricones
En esto que el chófer dándose por aludido con lo de maricón pega un frenazo del carajo, se levanta del asiento y le dice: "A ver si tiene cojones de repetir otra vez lo que acaba de decir"
Y le contesta el borracho:
"¿Cooooooómo lo voy a repetir oooootra vez?... si con el frenazo que ha pegao se ha rebujao tol mundo"



