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El ciclista de Euskaltel Euskadi Koldo Fernández de Larrea ha completado este sábado en ambulancia los casi 900 kilómetros que separán Bourges de Bilbao y ya se encuentra descansando en la capital vizcaína. Tras más de nueve horas de viaje, el alavés ha sido sometido a diferentes pruebas en una clinica bilbaína para evaluar el estado de las lesiones sufridas en el sprint de la Paris - Bourges. Fernández de Larrea permanecerá en observación y el lunes se decidirá si se le opera de la fractura de clavícula izquierda.
Nada más llegar a Bilbao, Koldo señalaba estar "cansado por el viaje. Son más de nueve horas de traslado y te cansas un poco, pero me han atendido muy bien. La verdad es que no recuerdo cómo fue la caída. Me da mucha rabia acabar así la temporada. La segunda parte del año estaba saliendo muy bien, estaba siendo muy regular, había conseguido dos triunfos, y acabar así la campaña me da mucha rabia. Ahora no queda más que recuperarse de los golpes y preparar la próxima temporada".
