El soprendente líder del Giro de Italia, el talaverano David Arroyo se enfrenta hoy a uno de los mayores retos de su carrera, defender el liderato de la Corsa rosa en una cronoescalada de auténtico miedo. Aparentemente 13 kilometros no deberían marcar muchas diferencias pero basta echar un vistazo al perfil para ver lo equivocada que puede ser esta afirmación.
La pendiente media en esta subida a Plan de Corones alcanza el 8,4% pero la rampa más dura se va nada más y nada menos que al 24%. Una auténtica pared. Pero ahí no acaba el peligro. En los últimos cinco kilómetros el asfalto desaparece bajo los neumáticos y da paso a un compuesto ecológico del s.XXI, el problema es que esta avanzada tecnología no triunfó como se esperaba. El compuesto es resbalidizo y sí como es espera las lluvías visitan a los corredores, la carretera se convertirá en una pista de patinaje.
Arroyo saldrá el último, a las 16:31 y tendrá en un pletórico Ivan Basso a su máximo rival. El italiano se verá obligado a atacar para recortar los 3:33 que le separan del español. Junto a él atacarán los Vinokourov, Evans y por supueto Carlos Sastre para quien la montaña es su mejor terreno.
Emoción y espectáculo en un Giro que no está defraudando.