Filippo Pozzato (Katusha) se impuso ayer en la duodécima etapa del Giro de Italia, disputada entre Citta Sant Angelo y Porto Recanati sobre 206 kilómetros. Richie Porte (Saxo Bank) continúa como líder de la carrera.
Aunque aparentemente la etapa no tenía mucha historia, el día volvió a estar animado en los kilómetros finales. Los descartados por el corte de la jornada anterior quisieron demostrar que siguen en la carrera y provocaron un corte para recortar unos segundos a los españoles Carlos Sastre (Cervélo), Xavi Tondo (Cervélo) y David Arroyo (Caisse d Epargne) y a un nervioso Cadel Evans (BMC).
Así, el kazajo Alexandre Vinokourov (Astana), y los italianos Ivan Basso (Liquigas), Vincenzo Nibali (Liquigas) y Stefano Garzelli (Acqua e Sapone) insistieron en cambiar el guión de una jornada hasta entonces tranquila y castigada por lo sucedido en la víspera.
Aunque el terreno no era demasiado para abrir una buena brecha, los Vino, Basso y Nibali arañaron una decena de segundos que seguramente no serán decisivos pero que demuestran que en este Giro no hay nadie descartado todavía.
Fue Pozzato, experto en llegadas el que se llevó la victoria por delante de los franceses Thomas Voeckler (Bbox) y Jerome Pineau (Quick Step).
Hoy se disputa la decimotercera etapa del Giro de Italia, entre Porto Recanati y Cesenatico sobre 223 kilómetros, la última tranquila antes de empezar a afrontar la durísima semana definitiva.