Con la mano derecha en el corazón y amenaza de lágrimas en sus ojos, Vincenzo Nibali escuchaba el himno de Italia en lo más alto del podio de Madrid. El transalpino ya tiene su primera grande. Lo ha conseguido con veinticinco años, después de finalizar tercero en el Giro, donde trabajó para su compañero Ivan Basso, perdiendo la maglia rossa sobre las descarnadas carreteras que conducían a Montalcino. Su futuro más cercano apunta al próximo Mundial de Geelong, donde será una de las puntas de lanza de la siempre potente Italia.
Con nueve años más pero no con menos ilusión, Ezequiel Mosquera disfrutaba de su primer podio en una grande. "Tengo ganas de estar casa. Quitarme este estrés continuo y disfrutar con la familia de una buena cena de patatas fritas con huevos", afirmaba jocoso el gallego. Mosquera confirmaba al final de la etapa que el próximo año formará parte de un equipo extranjero, posiblemente Vacansoleil, que le atraen pruebas que no conoce como Giro o Tour pero que quiere regresar a la Vuelta "una carrera a la que le tengo tomada la medida", aseguraba.
El podio lo ha completado la revelación de esta Vuelta a España, el eslovaco Peter Velits. También veinticinco años, campeón del mundo sub 23 en 2007. Velits no pudo competir en el Tour por una caída pero se ha desquitado, y de qué manera, en una Vuelta a España en la que además se ha hecho con el triunfo de etapa en Peñafiel, en la crono de esta edición.
Tyler Farrar supera a Cavendish
Tyler Farrar ha vuelto a demostrar que puede derrotar a Mark Cavendish y se reafirma como el rival más serio del inglés en la pelea de los sprints masivos. El norteamericano ha superado al propio Cavendish, a Allan Davis y a Wouter Weylandt en la línea de meta de Madrid, una de las más deseadas por los velocistas de todo el mundo. Farrar se marcha de la Vuelta con dos triunfos parciales (Lorca y Madrid), por los tres de Cavendish, que además se apunta la clasificación general de los puntos.
Una etapa de sólo 85 kilómetros con inicio en San Sebastián de los Reyes, pero que se lanzó desde su primer paso por la línea de meta. Dominik Roels, Olivier Kaisen, Jurgen Van Goolen, Gonzalo Rabuñal y Javier Ramírez Abeja lo intetaron por las calles de la capital de España. Los equipos de los hombres rápidos se pusieron serios a mitad del recorrido y dieron caza a la escapada a menos de dos vueltas.