Nueva victoria de McEwen. Antón sigue de amarillo

Robbie McEwen (Silence Lotto) repitió victoria en el sprint de la cuarta etapa del Tour de Suiza, disputada sobre 171 kilómetros entre Gossau y Domat-Ems, por delante de Oscar Freire (Rabobank) y Gerald Ciolek (High Road). Euskaltel Euskadi volvió a controlar la jornada para mantener en lo más alto de la general a Igor Antón. El maillot amarillo de la carrera superó un nuevo día en la ronda helvética y sigue acumulando experiencia en estas lides. El que no tuvo tanta fortuna fue su compañero de equipo Koldo Fernández de Larrea. Si en la tercera etapa rompió la rueda delantera a falta de cuatro kilómetros para la llegada, en esta ocasión no encontró hueco para batirse con McEwen, Freire y compañía, teniéndose que conformar con la vigésima plaza. El guión de la jornada fue una repetición del de la etapa anterior. Matej Jurco (Milram), Jerome Pineau (Bouygues) y Jonathan García (BMC) fueron los integrantes de una fuga que completó más de 160 kilómetros como cabeza de carrera. Este trío fue neutralizado a falta de seis kilómetros para la meta. Euskaltel Euskadi asumió el mando del pelotón desde el inicio y fue controlando las distancias hasta que los conjuntos de los velocistas tomaron la iniciativa en el último tramo de la carrera. High Road trabajó para Ciolek, pero en el último instante apareció Silence Lotto con McEwen para anotarse el triunfo. Koldo Fernández de Larrea tomó la rueda de Ciolek como la buena a falta de dos kilómetros, pero la incorporación del Silence Lotto por uno de los costados le dejó cerrado y no tuvo opción de progresar en el sprint. El miércoles 18 de junio se disputa la quinta etapa de la ronda, entre Domat Ems y Caslano sobre 190 kilómetros de recorrido. Una jornada dificil de controlar, con un alto de primera categoría en el kilómetro setenta de carrera que puede hacer mucho daño. Una vez coronada esta ascensión de casi veinte kilómetros, los ciclistas afrontarán una larga bajada de más de treinta, un alto de tercera categoría y otro de segunda. En resumen, un terreno ideal para las escaramuzas.