Aparte del norteamericano Taylor Phinney, como ganador de la persecución, dos ciclistas y dos equipos más subieron al podio en la segunda jornada de los Mundiales de pista de Copenhague, en pruebas que no tuvieron participación española.
En la primera final de la tarde, la de scratch, llegó el delirio de los daneses, gracias a la victoria de Alex Rasmussen, por delante del colombiano Juan Esteban Arango y del japonés Kazuhiro Mori, los tres con vuelta ganada.
Tras la decepción de ayer, el británico Chris Hoy ha vuelto por sus fueros, llevándose el oro en el keirin, por delante del malayo Azizulhasni y del alemán Maximilian Levy.
Australia confirmaba su recuperación a nivel mundial, imponiéndose en las dos pruebas femeninas por equipos. En la final de velocidad, derrotaban a China, lo que suponía la segunda medalla de oro en este Campeonato para Anna Meares, esta vez acompañadade Kaarle McCulloch. Lituania completaba el podio.
Y en persecución, sorprendía más su triunfo sobre la otrora imbatible Gran Bretaña, siendo Ashley Ankudinoff, Sarah Kent y Jopsephine Tomic las que recibieron el maillot arco-iris. Pero más sorprendente es que la selección clasificada en tercer lugar fuese la que batiera el record del mundo en la final de consolación: Nueva Zelanda, con un tiempo de 3-21-552, dos décimas más rápida que las ‘aussie’, que también superaban la plusmarca universal que tenían las británicas.
Resultados: www.tissottiming.com/sports/cycling/track/cmt2010/