Jesús Herrada ya es sexto de la general del Tour del Porvenir, que lidera ahora el británico Alex Dowsett, tras la disputa de la segunda etapa, Saint-Amand-Montrond-Cusset de 150,5 kilómetros, en la que se ha impuesto el francés Anthony Delaplace y en la que Vicente García de Mateos ha sido quinto.
La etapa se ha caracterizado por una fuga de tres ciclistas, el francés Delaplace, el holandés Bart Jan Lindeman y el danés Ricky Eno Jorgensen, consentida por el equipo del líder, Taylor Phinney, para llevar una carrera cómoda, por lo que han alcanzado hasta tres minutos de renta, aunque el danés se descolgaba en la parte final por una avería mecánica.
Sin embargo, todo se les ha ido al traste en los últimos veinte kilómetros por una caída de Phinney. La parte final de la etapa ha sido muy peligrosa ,con carreteras estrechas, continuas subidas y bajadas y el peligro de la lluvia. Todo el equipo español ha estado en los puestos cabeceros en ese tramo peligroso final aunque la mala suerte ha afectado a David de la Cruz a falta de unos 10 kilómetros por una caída. “Se ha hecho daño –comentaba el seleccionador, Ramón González Arrieta- y tiene muy tocada tanto la rodilla como el codo derecho, con perdida de sustancia. El doctor le ha tenido que dar puntos de sutura en el codo. A ver como pasa la noche. Mañana tendrá un día duro por las secuelas de la caída”.
Al final,no ha habido un equipo organizado para anular la escapada y los dos fugados han llegado a meta con una mínima ventaja de 8 segundos, ganando el ciclista galo, que ha dejado en última instancia al holandés. Romain Hardy (Francia) encabezaba el pelotón, por delante de John Degenkolb (Alemania), con García de Mateos quinto, Jon Izaguirre decimosexto, y Mikel Landa, vigésimocuarto.
Dowsett aventaja en un solo segundo al australiano Michael Matthews y en 14 al vencedor de hoy. Herrada (sexto, a 22”), Izaguirre (23º, a 39”) y García de Mateos (27º, a 41”) son los mejores clasificados en la general.
Hoy, gran oportunidad para los españoles en la primera etapa con final en alto, de Saint-Pourçain-sur-Sioule a Col du Béal, de primera categoría, tras una subida anterior, Col du Chansert, también en la parte final.