Larrinaga arranca la carrera hacia su cuarta Copa España

Javier Ruiz de Larrinaga pone en juego desde este sábado sus tres triunfos consecutivos en la Copa de España de ciclocross. El alavés de MMR-Spiuk regresará a la competición once días después de su retirada en el Trofeo Ayuntamiento de Muskiz, recuperado del proceso gripal que le impidió correr el pasado domingo en Ermua y con algo de incertidumbre sobre su estado de forma pero dispuesto para afrontar el reto de las pruebas asturianas de Gijón (sábado 12, 15.30h) y Navia (domingo 13, 13.15h). El corredor de Amezaga llegaba esta tarde al Principado con ganas de regresar a los puestos de honor, que no había abandonado hasta su retiro en la prueba vizcaína.

“Llegaré con algo de dudas a Gijón, después de la inactividad sobre todo en el arranque y siendo un circuito nuevo, pero para Navia seguro que ya estaré a tope”, declaraba Larrinaga durante su desplazamiento por carretera desde Euskadi. “El catarro está ya pasado, he podido entrenar mejor y ahora sólo queda ver hasta dónde podemos llegar, aunque después de tanto tiempo trabajando para estos cuatro meses de competición el cuerpo tiene que responder y seguro que estaremos a buen nivel”.

Cuatro son los nombres en los que piensa el campeón de España para disputarle el primer liderato que se entregará en las campas gijonesas: “Está claro que Egoitz Murgoitio está un poco por encima de los demás y será el gran favorito; David Lozano ha brillado en las primeras carreras y, aunque llevamos dos fines de semana sin correr con él, ganó en Cataluña hace poco y debería estar arriba; Isaac Suárez ha cogido poco a poco ritmo y confianza, en Muskiz estuvo cerca y en Colindres ya pudo ganar; y Aitor Hernández, del que ya pronosticábamos que mejoraría este invierno, está muy arriba con los grandes y no habrá que perderle de vista”.

La novedad del Trofeo Villa de Gijón con grandes profesionales españoles en su tercera edición, lo que hará el circuito nuevo para casi todos, contrasta con el Memorial Andrés Mendez, que en su séptimo año en el calendario es ya un viejo conocido para Larrinaga. “El año pasado fue el trazado de Copa de España donde me fueron menos bien las cosas, y es una espinita que quiero sacarme. Es, además, un circuito con un poco de todo: zonas de prado, técnicas con árboles y arena de playa, que exige mucho a todos los niveles y donde quiero realizar un buen papel”. Todo ello, con la mente en las únicas dos carreras que restarán -Puente Viesgo, el 8 de diciembre, y Alcobendas, el 11 del mismo mes-, lo que añade “una responsabilidad mayor que, aun así, ya hemos pasado otras veces y con la que convivimos”.