.jpg)
A pesar de la incertidumbre que todavía reina sobre la condición de Javier Ruiz de Larrinaga, el tricampeón de España de ciclocross ha recibido buenas noticias sobre el alcance de la lesión producida en su rodilla izquierda durante la penúltima vuelta del Superprestigio RFEC de Muskiz. La resonancia a la que fue sometido el corredor de MMR-Spiuk a primera hora de la tarde de ayer martes en el centro USP Mediplan Sport de Vitoria descarta cualquier lesión grave en ligamentos o fracturas, aunque confirma la existencia de "un pequeño golpe", en palabras del alavés.
"Las primeras pruebas apuntaban a que podía tratarse de un pequeño roce en el menisco y parece que finalmente será así, aunque hasta mañana no pasaré consulta", explica el de Amezaga, cuyas lesiones serán examinadas a fondo por el doctor Íñigo Simón este jueves. "En función de la conversación que tengamos allí y de los plazos de reposo y rehabilitación que sean necesarios veremos cuál es mi calendario, aunque, en principio y salvo sorpresa favorable, tanto la carrera de Arbulo del sábado como el Superprestigio de Elorrio del domingo, y con ello la general del torneo, están descartados".
"Es mucho elucubrar ahora mismo y todavía tengo que saber si los médicos me dan permiso para subirme a la bici o no, pero aunque lo hiciesen, entonces será jueves y mi condición física no sería ni mucho menos la adecuada", sostiene un Larrinaga que, tras guardar reposo durante el lunes, recibió permiso desde ayer "para andar por casa o salir a hacer pequeños recados. Me molestaba bastante al caminar y, aunque hoy estoy un poco mejor, todavía me noto algo cojo y no puedo estirar la pierna totalmente al caminar sin sentir molestias. Por fortuna, esto nos ha sucedido en noviembre y, aunque incluso la primera salida a Bélgica de la próxima semana esté condicionada por la rehabilitación que haya que seguir, es mejor que pase ahora a que suceda en diciembre o enero. Y tal y como hemos comenzado la temporada, lo único importante es recuperarse bien
